Mena M.1,2, Selamé,R.1,2, Corral G.1,2, Córdova S.1,2, Araya C.1,2
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https://doi.org/10.25237/congresoclasa2019.16 | PDF
Introducción: Más de un 10% de los recién nacidos
en todo el mundo son prematuros. Estos pacientes tienen alto riesgo de tener
secuelas tardías del neurodesarrollo por daño cerebral.
La oximetría cerebral no invasiva utilizando la tecnología NIRS
(near infrared spectroscopy) es útil para detectar isquemia-hipoxia cerebral
relacionada con hipoperfusión e hipoxemia y determinar distintas intervenciones
para prevenir o disminuir la injuria por hipoxia cerebral.
Uno de los factores involucrados en la injuria
cerebral relacionada a la perfusión en el paciente prematuro es atribuida a la
falta de autorregulación cerebrovascular.
Método: Recién nacido de pre término (RNPT) de 38 semanas de edad
gestacional, nacido a las 36 semanas, con antecedentes de onfalocele gigante y
distrés respiratorio recuperado. Ingresa a pabellón para manejo operatorio de su
onfalocele.
La monitorización estándar incluyó: saturometría de O2 (SpO2),
presión arterial no invasiva (PANI), electrocardiograma, temperatura y CO2
espirado (etCO2).
Previo a la inducción anestésica se colocaron los sensores de NIRS
en la región frontoparietal izquierda y derecha, midiéndose la SrO2C. El valor
basal obtenido fue 82% izquierda/86% derecha. La PANI basal fue de 46 mm Hg.
Para la inducción y mantención anestésica se utilizó sevoflurano,
suplementado con fentanilo y atracurio.
La ventilación mecánica controlada fue iniciada con un etCO2 basal
de 49 mm Hg. Durante la manipulación del onfalocele, en el intento de introducir
todo el defecto, en forma inadvertida por los cirujanos se produjo una rotación
del pedículo hepático que se evidenció por una brusca caída de la SrO2C con
valores de NIRS de 50% a izquierda y 57% a derecha, caída de la PAM bajo 32 mm
Hg y etCO2 a 28 mm Hg. Los cirujanos fueron advertidos de los profundos cambios
hemodinámicos y de oxigenación, logrando reconocer el problema y liberar la
rotación, con lo que se produce un aumento progresivo de la SrO2C, seguido de un
incremento de la PAM y etCO2.
Resultado y Discusión: La SrO2c medida utilizando
la tecnología NIRS es un indicador indirecto de flujo sanguíneo cerebral (FSC) y
perfusión cerebral. El descenso de la SrO2C se correlacionó directamente con la
caída de la PAM y etCO2.
El presente caso nos ilustra el potencial valor del uso de NIRS en
el ajuste de los parámetros hemodinámicos y ventilatorios y en diagnosticar y
sugerir al equipo quirúrgico cambios necesarios en el curso de la cirugía.